Artículo Original.
El 14 de mayo se registraron violentas protestas en el límite que separa Israel con la Franja de Gaza. Las protestas coincidieron con la inauguración de la embajada estadounidense en Israel, a exactamente setenta años desde que el Estado judío declarase su independencia. Los medios internacionales recogieron la envergadura de las protestas, que resultaron en la muerte de por lo menos 52 palestinos y cientos de heridos.
Varios países, organismos internacionales y organizaciones de la sociedad civil condenaron rápidamente a Israel por utilizar munición real y hacer un uso supuestamente desproporcionado de la fuerza. Por otro lado, fuentes israelíes presentaron evidencia que vincula a muchos manifestantes muertos con el brazo armado de Hamas, cosa que el grupo islamista no refuta. No obstante, la atención mundial nuevamente volvió a centrarse en Israel y la percibida crudeza con la que trata a los palestinos, particularmente en un momento visto por muchos como una bisagra en el conflicto. La decisión del presidente Donald Trump de reconocer a Jerusalén como la capital israelí es vista como un gesto sin precedentes para su aliado, y por ende una embestida que atenta contra las esperanzas de los palestinos.
Pero por fuera de las narraciones mediáticas, lo cierto es que el panorama es más complejo de lo que aparenta, y es conveniente repasar la situación en el terreno. Continuar leyendo «Otra victoria para Hamas»