Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 22/09/2019 bajo el título «El futuro incierto de Netanyahu».
El 17 de septiembre Israel celebró elecciones generales por segunda vez consecutiva en un año. Sin embargo, al igual que los primeros comicios de abril, los resultados no rompieron la grave parálisis política que atraviesa el país. Esto se debe a que ningún partido o alianza puede formar Gobierno sin antes recurrir a plataformas incompatibles o antagónicas.
Tal y como reflejan distintos titulares, el impasse en el parlamento hebreo podría significar la caída de Benjamín Netanyahu, el primer ministro que más tiempo ha liderado Israel. No por poco, las últimas elecciones fueron percibidas como un referéndum a la figura del mandatario; a la continuidad del “rey” Bibi en el poder. Lo cierto es que los actores principales coinciden en que Netanyahu se tiene que ir, pues es el obstáculo más importante que dificulta un acuerdo de unidad.
La política israelí contemporánea es un verdadero juego de tronos con drama, traición y rencores. El líder del oficialismo es la pieza central, pero su situación en el tablero es la más precaria. Por lo pronto, el partido gobernante Likud perdió la mayoría parlamentaria, habiendo obtenido 31 escaños frente a los 33 que ganó la lista “Azul y Blanco” (Kahol Lavan) encabezada por Benny Gantz. Este resultado habla de la polarización de la sociedad israelí entre partidarios y detractores del primer ministro. Continuar leyendo «El rey Bibi camina por la cornisa»