El internacionalista argentino Federico Gaon explicó en Al fin de Semana como la política ha estado presente en cada una de las 24 películas del agente 007. El personaje nació con la Guerra Fría en la última entrega el contexto político no es ajeno, ahora con el terrorismo como enemigo.
Artículo publicado originalmente en BASTION DIGITAL el 04/11/2015.
Spectre, la nueva película del agente secreto más popular del mundo acaba de ser estrenada. Es la cuarta entrega que tiene a Daniel Craig en el prodigioso papel de James Bond. Además de prometer acción, el protagonismo de bellas mujeres y automóviles impresionantes, la cinta le aporta cierta refinación a la saga, la cual seguramente será bienvenida por los seguidores acérrimos de 007. La trama se vale de elementos clásicos de las películas del agente secreto más heterodoxo del MI6 británico. Para empezar, el título se basa justamente en SPECTRE, el notorio cartel del crimen al cual Bond se enfrenta en las novelas de Ian Fleming, y en las primeras películas. En este sentido, la flamante cinta, la Bond número 24, también revive al icónico villano Ernst Stavro Blofeld. El legado del antagonista hoy es continuado por Christoph Waltz, quien le da nueva vida al personaje, acercándolo a una audiencia del siglo XXI. Al igual que Bond, los antagonistas también deben renovarse para adaptarse, y así llegar a nuevas audiencias, sin perder su potencia.
El estreno de una nueva película de James Bond siempre es motivo para celebrar al afamado agente que ha inspirado a millones durante generaciones. Mas la ocasión también amerita un repaso por la realidad detrás de la ficción. A lo largo de sus cinco décadas en la pantalla, Bond se ha visto inserto en varias tramas que reflejaban, o mejor dicho exploraban, las distintas coyunturas internacionales contemporáneas a la acción. Bond es un producto de la Guerra Fría, pero el héroe ha sabido mantenerse fresco con el paso del tiempo, ajustándose a las nuevas situaciones internacionales que trastocaban la producción de sus películas. Por ello, aquí propongo ilustrar, aunque sea brevemente, la evolución del espía más afamado de la pantalla grande.