Artículo Original. También publicado en INFOBAE el 16/10/2019.
El 9 de octubre Turquía lanzó la llamada operación “Primavera de la Paz” en el norte de Siria. Con esta invasión Ankara esperar truncar de una vez por todas la configuración de una estatidad kurda en su área de injerencia histórica. En particular, la última ofensiva busca integrar y expandir los frentes de combate ya existentes, en tanto no son suficientes para prevenir la aparición de una entidad kurda en el patio trasero de los turcos.
“Primavera de la Paz” es una crónica anunciada que no toma a nadie por sorpresa. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, viene advirtiendo acerca de este escenario desde hace por lo menos dos años. A diferencia de otros actores, Turquía es expeditiva comunicando sus intereses. Estos se centran en estabilizar la zona aledaña a su frontera meridional, barriendo del mapa a las milicias kurdas y otros elementos insurrectos que reclaman autonomía.
En vista de dicha transparencia, la novedad no es la invasión en sí misma, pero más bien la aquiescencia estadounidense para que esta suceda. En efecto, el apoyo de Washington a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), y a sus brazos subordinados como las Unidades de Protección Popular (YPG), disuadía a Erdogan de emprender acciones a gran escala a lo largo de toda la frontera.
La decisión de Donald Trump de abandonar a estos grupos a su suerte lo cambia todo, poniendo de manifiesto que las tensiones geopolíticas en Siria no sanarán en el futuro previsible. Continuar leyendo «Entre la espada y la pared: las claves geopolíticas en el norte de Siria»