El regreso del faraonismo en Egipto

Artículo Original.

El 3 de abril el Gobierno egipcio celebró una procesión grandilocuente en las calles de El Cairo. Embellecidos féretros con las momias de 22 reyes y reinas del Antiguo Egipto se desplazaron del Museo Egipcio al nuevo Museo Nacional de la Civilización Egipcia, inaugurado por el presidente Abdel Fattah al-Sisi. El evento puso de relieve la importancia del nacionalismo faraónico en el proyecto nacional del régimen. Su éxito o fracaso podría traer consecuencias importantes para Medio Oriente. Crédito por la imagen: transmisión vía la BBC.

En su estudio seminal sobre los orígenes del nacionalismo, Benedict Anderson establecía que todas las comunidades políticas son construcciones socialmente imaginadas, articuladas mediante narrativas orquestadas; y, no obstante, apañadas en memorias colectivas con las que una determinada población se siente representada. Genérica y sociopolíticamente, el nacionalismo cumple el propósito moderno de infundir solidaridad y afinidades comunes entre personas que no se conocen entre sí. Gracias a estos vínculos, la población de un país puede interrelacionarse intergeneracionalmente con sus ancestros y coterráneos, compartiendo y transmitiendo aspiraciones comunes, y las mismas sensaciones encontradas para con otros colectivos o naciones.

Entrada la Modernidad, Egipto, como tantos otros países convertidos en Estado, se debatió que héroes utilizar para formar un panteón original, y que valores y mitos fundacionales encuadrar como parte del ethos nacional. A diferencia del resto de las entidades soberanas del mundo árabe, generalmente constituidas a partir de la injerencia colonial europea, Egipto cuenta con una rica historia milenaria que precede al islam. Por tanto, una de sus expresiones nacionalistas traza continuidad discursiva entre la antigua civilización de los faraones y las vicisitudes contemporáneas, suponiendo que el país de las pirámides siempre ha constituido una unidad independiente, separada del resto de Medio Oriente.

El grandilocuente desfile dorado de los faraones, celebrado el 3 de abril en El Cairo, y con trascendencia mediática internacional, refleja quizás la lectura o la experiencia que el presidente Abdel Fattah al-Sisi asume para dar cuenta de la identidad de su tierra; una que, luego de un siglo de desventuras entre liberales, panarabistas, e islamistas, aún no encuentra un modelo nacional consensuado. Aunque los egipcios pueden estar orgullosos de las grandes contribuciones que aportaron sus antepasados, no todos contemplan el legado de los reyes politeístas de la misma forma, sobre todo a la luz de las enseñanzas y tradiciones iconoclastas del islam. Continuar leyendo «El regreso del faraonismo en Egipto»

¿Una alternativa al canal de Suez?

Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 14/04/2021.

El buque portacontenedores de la naviera Evergreen estuvo atorado transversalmente en el canal de Suez entre el 23 y el 29 de marzo, paralizando el tráfico comercial y causando pérdidas millonarias. El incidente despierta el interés por la planificación estratégica en política internacional, e invita a dar con alternativas para diversificar las rutas marítimas. Crédito por la imagen: Maxar Technologies.

El reciente bloqueo del canal de Suez demuestra, en clave geopolítica, la necesidad de crear nuevos pasos para el comercio internacional. Por el canal egipcio, un cuello de botella inaugurado hace poco más de 150 años, circula más del 10 por ciento del tráfico marítimo mundial, de modo que el estancamiento del portacontenedores panameño, varado durante una semana, causó pérdidas descomunales.

Según la aseguradora británica Lloyd’s, cada día de bloqueo costó 9.600 millones de dólares en pérdidas directas, pero posiblemente mucho más en los desgastes indirectos de las jornadas desperdiciadas. En consecuencia, más que anecdótico, el fiasco puso de relieve la vulnerabilidad de las cadenas logísticas extensas, la necesidad de abaratar costos, y el desafío de minimizar riesgos a la continuidad de negocios. Continuar leyendo «¿Una alternativa al canal de Suez?»

Una excepción a la regla: Kosovo reconoce a Jerusalén como capital de Israel

Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 03/04/2021.

Las banderas de Kosovo e Israel lado a lado en la flamante embajada kosovar en Jerusalén. El establecimiento de relaciones diplomáticas entre estos países señala que la solidaridad religiosa no lo es todo en política internacional. Crédito por la imagen: Anadolu Agency.

El 14 de marzo Kosovo formalizó la apertura de su embajada en Jerusalén, convirtiéndose en la primera entidad europea en reconocer (de iure) la capital israelí. Con esta decisión, el país balcánico se une a Estados Unidos y a Guatemala en derogar la disputa territorial por la ciudad santa, en claro detrimento de los intereses palestinos. No obstante, debido precisamente a ello, lo más llamativo del asunto estriba en la identidad musulmana de la nación kosovar.

En un principio se trata de una jugada políticamente contraintuitiva, pues actúa en contra de todas las convenciones establecidas. De algún modo, reconocer la soberanía israelí en Jerusalén equivale a concederle la victoria al Estado judío, ya sea de forma simbólica, retórica, o jurídica. Implica asumir que la narrativa israelí triunfa por sobre los reclamos palestinos, sin importar cuales fueran las intenciones o motivaciones que tuvieran los actores involucrados.

El caso kosovar merece especial atención porque sobrepasa las desavenencias religiosas de Medio Oriente y los Balcanes. En este sentido, en conjunción con la apertura de algunos países árabes hacia Israel, el acercamiento entre Pristina y Jerusalén podría servir de antecedente positivo para socavar, por medio de influencias externas, el fuerte componente religioso existente en el conflicto israelí-palestino. Continuar leyendo «Una excepción a la regla: Kosovo reconoce a Jerusalén como capital de Israel»

Arabia Saudita: la gallina de los huevos de oro

Artículo Original.

Todos los caminos en la agenda de paz de Medio Oriente conducen a Riad. Arabia Saudita estaría considerando bajo qué condiciones estaría dispuesta a firmar un tratado de paz con Israel. El acuerdo saudita tendría grandes ramificaciones en la política del mundo musulmán. Crédito por la imagen: adznano3 / Shutterstock. 

En el lenguaje de la ciencia política estadounidense, Donald Trump es ahora un lame duck, una suerte de “pato incapacitado”, que debe aceptar con resignación la transición de poder. Se entiende, por lo menos convencionalmente, que un presidente saliente no debe tomar medidas drásticas que pudieran desafiar o contradecir las voluntades del presidente entrante.

No obstante, es evidente que hay distancia entre los supuestos teóricos y los acontecimientos prácticos, incluso en materia de política internacional. En este sentido, aunque probablemente compute en la ecuación de los analistas, el carácter errático de Trump no es el único factor en arrojar imprevisibilidad. En lo que compete a los asuntos globales, dejando de lado el COVID-19, tal vez podría haber alguna sorpresa de cara a la inauguración de Joe Biden el 20 de enero.

Desde que entró al despacho oval, Trump quiso sellar su legado con una paz inédita y comprensiva entre israelíes y palestinos. Aunque se hizo evidente que tamaña ambición no se materializará en el futuro inmediato, en su defecto Trump logró extender el reconocimiento diplomático hacia Israel en el mundo árabe. Con todo, en vista de algunos especialistas, este logro no será una paz generalizada hasta en tanto Riad no se sume a los llamados Acuerdos de Abraham. Podríamos decir que Arabia Saudita es la gallina de los huevos de oro, y si lo desea podría congraciar a Trump antes de que su mandato expire en menos de un mes. Continuar leyendo «Arabia Saudita: la gallina de los huevos de oro»

¿Vientos de paz en Medio Oriente?

Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 14/08/2020.

El Ayuntamiento de Tel Aviv se enciende con la bandera de los Emiratos Árabes Unidos el 13 de agosto de 2020, luego de que se anunciara el país estableceria relaciones diplomáticas con Israel. Credito por la imagen: Oded Bality / AP.

El 13 de agosto Donald Trump anunció que los Emiratos Árabes Unidos e Israel acordaron establecer relaciones diplomáticas plenas, compartiendo por Twitter una declaración conjunta de las partes involucradas. Con este desarrollo, los Emiratos se convertirán en el tercer país árabe, luego de Egipto y Jordania, en reconocer abiertamente la existencia de Israel a los efectos de intercambiar embajadores.

Según lo estipulado, el acuerdo llega como un compromiso. A cambio de oficializar relaciones, Israel se compromete a congelar los ya anunciados planes para anexionar territorios en Cisjordania. Esta premisa podría sugerir que nos encontramos ante un nuevo escenario regional en Medio Oriente, quizás vaticinando mayores acuerdos entre Jerusalén y las capitales del Golfo. ¿Se vienen vientos de paz? Continuar leyendo «¿Vientos de paz en Medio Oriente?»

Hagia Sophia: ¿Choque de civilizaciones?

Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 15/07/2020.

Un grupo de creyentes musulmanes realiza las oraciones de la tarde en la plaza de Hagia Sophia en Estambul, el 10 de julio de 2020. La decisión del Gobierno turco de convertir la icónica estructura en una mezquita representa un intento por politizar el «choque de civilizaciónes» para apalancar la imagen del país en el mundo islámico. Crédito por la imagen: Anadolu Agency.

Cumpliendo con promesas electorales, el oficialismo turco anunció el 10 de julio que Hagia Sophia (Santa Sofía), la referencia arquitectónica por excelencia de Estambul, sería transformada en una mezquita. Previsiblemente, la decisión causó profundo malestar entre las comunidades e instituciones cristianas, sobre todo en el mundo ortodoxo. Según el punto de vista de los creyentes agraviados, la islamización de la otrora catedral patriarcal es una clara provocación.

Grecia, la heredera cultural de Bizancio, amenazó con orquestrar una campaña internacional de despestrigio y elevar el asunto en las Naciones Unidas. Rusia, si bien rehacia a criticar las políticas domésticas de los turcos en público, dejó entrever su malestar. Fuentes gubernamentales manifestaron que la imagen de Turquía entre los creyentes cristianos sufriría irreparablemente hasta que la decisión no sea revertida.

Está polémica, simbólica mas no menos geopolítica, hace reflotar la tesis del “choque de civilizaciones”. Popularizada en el marco de los ataques del 11 de septiembre de 2001, la teoría es particularmente conocida por postular que el Islam tiene “fronteras sangrientas”. Según articulaba Samuel Huntington, los Estados musulmanes raramente se reconcilian con sus vecinos de otras denominaciones, arrojando una tradición que antagoniza o contrasta negativamente con otros grupos culturales. Continuar leyendo «Hagia Sophia: ¿Choque de civilizaciones?»

La cuestión de la anexión de Cisjordania

Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 01/06/2020.

El primer ministro Benjamín Netanyahu explica sus planes para anexar el valle del Jordán (pintado de azul en el mapa) durante una presentación el 10 de septiembre de 2019. De concretarse tales planes, Israel podría poner en peligro su seguridad y su reputación o lugar entre las naciones occidentales. Crédito por la imagen: Hadas Parush / Flash90.

Tras el establecimiento de una coalición de Gobierno en Israel, Benjamín Netanyahu afirmó que empujaría para llevar a cabo la anexión del 30% de Cisjordania, incluyendo el valle del Jordán. Como era previsible, y pese a la atención mediática puesta en la presente pandemia, tales declaraciones no pasaron desapercibidas. A nivel internacional, las pretensiones del primer ministro fueron contestadas con fuertes advertencias. Mismo así, comenzando por los debates domésticos, no son pocas las controversias en torno a la extensión de soberanía judía sobre Judea y Samaria, las regiones bíblicas cisjordanas típicamente catalogadas como territorios ocupados.

A decir verdad, como hoja de ruta, la anexión supone la confirmación de realidades en el terreno, de por sí virtualmente inalterables bajo cualquier tipo de tratado de paz. Si bien Israel no estaría anexando la totalidad de Cisjordania, estaría oficialmente incorporando los principales bloques de asentamientos, bajo los lineamientos contemplados en el plan de paz de Donald Trump. Se trata de rubricar jurídicamente la soberanía que el Estado judío ya ejerce sobre grandes parcelas de territorio que los palestinos reclaman como suyo. Según puede contemplarse, la medida unilateral sería una suerte de balde de agua fría para despertar al liderazgo palestino, acaso forzándolo a negociar so pena de perder mayores territorios.

No obstante, asumiendo que la proposición anexionista se lleve a cabo, dichos planes claramente trascienden el límite de las formalidades. Para empezar, la anexión podría desencadenar un duradero estadio de violencia, en tanto los jefes palestinos “moderados” desconocerían todo acuerdo y esfuerzo de cooperación conjunta con las autoridades israelíes. Si para los partidarios de Netanyahu la anexión simboliza la consecución de las aspiraciones sionistas, para los palestinos es también la realización, acaso desesperada, de que el statu quo es precisamente inalterable. En segundo término, tal como argumentan destacados veteranos de la seguridad israelí, la anexión podría forzar a los mandatarios de la región a renunciar a los tratados de paz y truncar futuras iniciativas en esta dirección. Continuar leyendo «La cuestión de la anexión de Cisjordania»

Siria y Turquía en guerra: ¿y Rusia?

Artículo Original.

Vista del poblado de Ariha el 19 de febrero de 2020 en la provincia de Idlib. Se está produciendo una escalada sin precedentes entre Turquía y las fuerzas del Gobierno sirio, que podrían llevar a una confrontación directa, o peor aún, por extensión, a una guerra entre turcos y rusos. Crédito por la imagen: Muhammed Said.

La reciente escalación en Idlib está cambiando el panorama de la guerra en Siria, dejando entrever la posibilidad de un enfrentamiento armado directo entre las fuerzas de Bashar Al-Assad y las tropas del presidente turco Recep Tayyip Erdogan. Mientras que el primero busca recuperar sus dominios y erradicar la insurgencia islamista, el segundo quiere una zona de contención para mantener el statu quo.

En concreto, al momento de escribir estas líneas, cerca de cincuenta soldados turcos perdieron la vida tras ataques aéreos sirios, llevados a cabo entre el 27 y el 29 de febrero. Aunque se discute sobre si Rusia estuvo involucrada, cosa que el Kremlin desmiente, lo cierto es que así lo cree Ankara. Como la situación en el terreno se contrapone a sus ambiciones, Erdogan apela ahora a la asistencia de la OTAN, apremiando a Occidente con nada más y nada menos que la carta demográfica. El 28 de febrero el Gobierno turco abrió las puertas de su país para que los refugiados sirios, unos 3,7 millones aproximadamente, puedan desplazarse a Europa si así lo desean.

Estos desarrollos son sumamente relevantes porque difícilmente tengan vuelta atrás. Hasta ahora el conflicto en Siria era visto no solo como una conflagración sectaria, pero también como una guerra proxy o subsidiaria. Desde que el país levantino hiciera implosión en 2011, los actores regionales e internacionales comenzaron a tomar partido por uno u otro bando, apoyando logística y financieramente a milicias armadas contrapuestas. Todo parece indicar que esta etapa de la guerra está terminando, dando paso a un conflicto convencional implícito entre Turquía y el régimen en Damasco, con el agravante del fuerte involucramiento ruso en beneficio de este último. Continuar leyendo «Siria y Turquía en guerra: ¿y Rusia?»

El plan de paz de Trump para Medio Oriente

Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 04/02/2020.

El presidente estadounidense Donald Trump y el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu anuncian e en la Casa Blanca el nuevo plan de paz para el conflicto israelí-palestino, el 28 de enero de 2020. Aunque el programa es marcadamente proisraelí, su relevancia estriba en el reconocimiento explícito que recibio por parte de Egipto y las monarquías del Golfo.

El 28 de enero la Casa Blanca dio a conocer la “Visión por la Paz” para resolver el conflicto israelí-palestino. Donald Trump hizo el anuncio del proyecto en compañía de Benjamín Netanyahu, pidiendo al liderazgo palestino aceptar la iniciativa. Para los partidarios de la alianza israelí-estadounidense, se trata de una solución ingeniosa que busca diferir controversias políticas por medio de un paquete económico y un plan de infraestructura sin precedentes. En cambio, para sus detractores, es un plan insípido, tan tendenciosamente proisraelí que se hace impracticable.

¿Qué lectura debe hacerse entonces del asunto? Si bien el programa estadounidense fue boicoteado de antemano por el liderazgo palestino, lo interesante es que Trump cuenta abiertamente con el apoyo de Arabia Saudita, Egipto, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos. Este es un desarrollo sin parangón en la historia del problemático proceso de paz iniciado formalmente con los acuerdos de Oslo de 1993. Más allá de los parámetros estipulados en el programa, en la alta política árabe queda claro que el conflicto no será resuelto mediante la iniciativa de los palestinos. En esta posición existe un reconocimiento implícito a Israel como potencia regional, y una valorización de la consecuente necesidad realista de normalizar relaciones diplomáticas en cuanto sea posible.

Incluso si el programa de paz no es llevado a cabo, la “Visión por la Paz” ofrece un marco para que los países árabes que no reconocieron formalmente a Israel puedan hacerlo. De alguna manera, justamente gracias a la parcialidad del plan, la pelota está en la cancha palestina; de modo que todo fracaso en la implementación recae discursivamente en la falta de voluntad de los líderes palestinos. Aunque el plan de Trump puede leerse como una imposición unilateral, demuestra simultáneamente la transversalidad del pragmatismo y la fuerza militar en la política internacional. No obstante, creo que es erróneo decir que los Estados árabes están dispuestos a sacrificar el bienestar de los palestinos en pos de normalizar relaciones con Israel. Continuar leyendo «El plan de paz de Trump para Medio Oriente»