Artículo Original. Publicado también en INFOBAE el 03/04/2021.
El 14 de marzo Kosovo formalizó la apertura de su embajada en Jerusalén, convirtiéndose en la primera entidad europea en reconocer (de iure) la capital israelí. Con esta decisión, el país balcánico se une a Estados Unidos y a Guatemala en derogar la disputa territorial por la ciudad santa, en claro detrimento de los intereses palestinos. No obstante, debido precisamente a ello, lo más llamativo del asunto estriba en la identidad musulmana de la nación kosovar.
En un principio se trata de una jugada políticamente contraintuitiva, pues actúa en contra de todas las convenciones establecidas. De algún modo, reconocer la soberanía israelí en Jerusalén equivale a concederle la victoria al Estado judío, ya sea de forma simbólica, retórica, o jurídica. Implica asumir que la narrativa israelí triunfa por sobre los reclamos palestinos, sin importar cuales fueran las intenciones o motivaciones que tuvieran los actores involucrados.
El caso kosovar merece especial atención porque sobrepasa las desavenencias religiosas de Medio Oriente y los Balcanes. En este sentido, en conjunción con la apertura de algunos países árabes hacia Israel, el acercamiento entre Pristina y Jerusalén podría servir de antecedente positivo para socavar, por medio de influencias externas, el fuerte componente religioso existente en el conflicto israelí-palestino. Continuar leyendo «Una excepción a la regla: Kosovo reconoce a Jerusalén como capital de Israel»